Albategnius, este sabio árabe perfeccionó el uso del sistema trigonométrico en astronomía y realizó observaciones celestes con una exactitud sin precedentes.
Al-Battani refinó los cálculos sobre la inclinación de la eclíptica, la precesión de los equinoccios y la longitud del año solar, corrigiendo datos previos de Ptolomeo. Introdujo funciones trigonométricas como la tangente y mejoró las tablas de senos, lo que facilitó el desarrollo de la trigonometría moderna.
Su obra más influyente, el Kitāb az-Zīj (Libro de las Tablas Astronómicas), fue una referencia clave en Europa durante la Edad Media e inspiró a científicos como Copérnico. Gracias a su legado, la matemática y la astronomía avanzaron significativamente, dejando huellas imborrables en la historia del conocimiento.
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